El pueblo histórico: pasee por sus típicas callejuelas y admire la iglesia de Saint-Julien-et-Sainte-Basilisse, con sus abundantes frescos antiguos.
La Chapelle de Juhègues : Este apacible lugar del siglo XI está cargado de historia y acoge eventos culturales en verano.
Les Bunkers de Torreilles : testigos de la Segunda Guerra Mundial, estas reliquias costeras ofrecen un recorrido didáctico.
Les Plages Sauvages: un litoral virgen y sin construcciones, ideal para nadar y pasear. ¡Y sus preciosas cabañas de paja!